A veces ocurre que…
…Las cosas no son como pensabas…
Que, de pronto, el corazón da la vuelta, con él toda tu alma, y descubres
nuevos horizontes… Nuevas tierras, nuevas miradas, nuevos sentimientos… Tu
forma de pensar y de sentir cambia, evoluciona, se abre…
…Los ojos de antes ya no ven como
los ojos de ahora… Los ojos de ahora observan con un brillo especial, con el
brillo de la consciencia, con el brillo del sentimiento a flor de piel, con el
brillo de cualquier cosa…
A veces ocurre que…
…Llega Alguien y rompe todos tus
esquemas, todas tus creencias y convicciones… porque ese Alguien se hace uno
contigo y se convierte en tu Religión y en tu Fe.
A veces ocurre que…
…Te sientes en perfecta comunión con
todo lo que te rodea, todo cuanto respiras, todo cuanto tocas, sientes,
percibes… Y la sensación es tan intensa y emocionante que quisieras
desintegrarte en ese preciso instante con el Todo. Las lágrimas caen por tus
mejillas al observar tanta, tanta belleza ahí afuera… Y sentir cada soplo del
viento en tu rostro, cada roce del Sol en tu piel... Al resonar el sonido de
las hojas de los árboles, al zambullirte con el mar, hacerte delfín y fundirte
con él, absolutamente desnudo, en cuerpo y alma… “Quiero desintegrarme ahora” –
piensas- con los ojos llenos de brillo y sal.
A veces ocurre que…
…Los sueños que sueñas son tan
reales y tangibles, tan vívidos y sentidos…Que no sabes discernir entre lo que
es realidad y lo que es ficción. Te conviertes en sueño, en mi sueño, y, dentro
de él, me expreso libre de ataduras, sin ropas, sin retratos… Sin miedo. El
sueño es solo reflejo de una realidad, de un secreto inconfesable, de una
veracidad material… Ya no sé qué es sueño, qué es realidad… Ya no sé si viajo,
si solamente estoy dormido, si estás a mi lado o si estoy a solas con mi alma…
A veces ocurre que…
…Ríes y lloras a la vez, que tus
emociones son tan intensas y la sensación de plenitud es tan desmedida y
abundante, que no sabes si estás vivo o eres solamente un espíritu vagante, en
total y absoluta libertad, que se fusiona con la naturaleza…
A veces ocurre que…
Deseas, con todas tus fuerzas,
abrazar a tod@s, abrazarlo todo, … Deseas amar, amar con mayúsculas… Tu corazón
te pide a gritos abrazarlo todo, sin tabúes ni prejuicios. Amar y solo amar.
Amar desde el corazón, sin más.
A veces ocurre que…
…Me expreso, como ahora, y en
realidad no sé qué debo expresar, qué tengo que comunicar… Mi garganta a veces
se hace un nudo cuando mi alma, sin embargo, desea fluir, fluir y fluir, cuál
hojas de otoño, que se desvanecen y bailan con el viento…
A veces ocurre que…
…Mis ojos hablan por mí, mis
movimientos, mi piel, mi respiración… Las palabras no fluyen, están encerradas,
cuál pájaro en una jaula… Mi corazón y mis ojos hablan por ellas… Habla la
ternura, habla la mirada, sobran las palabras…
A veces ocurre que…
…Me siento tan ligero… Las palabras
no forman parte del mágico mundo de las Hadas, sólo el lenguaje del cuerpo y el
dulce movimiento del ondear de las alas...
Hola me ha gustado mucho la entrada. La música junto con el texto es una combinación explosiva jeje muchos besitos
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